Si Jesucristo te llama a la vida religiosa… ¡Alégrate!
“La llevaré al desierto y le hablaré al corazón. Allí me responderá como en su juventud, como cuando salió de Egipto. Aquel día – oráculo del Señor- me llamarás Esposo mío”
Oseas 2, 16-18.
Querida Joven, si Jesucristo te llama ¡Alégrate! Vive la experiencia de discernir el llamado que Dios tiene para ti. (Jr.1,5…)
Fuiste creada con el propósito de amar y servir. Pero te has preguntado: ¿dónde? y ¿cómo? La felicidad que muchas veces has buscado en el mundo, marcada por el tener, poder y placer, es pasajera y solo deja más vacíos y heridas en el alma y en el corazón. (Jn.4,10).
Escucha el llamado que Dios te hace hoy, a tener una vida nueva como le dijo a Nicodemo. (Jn.3, 1-8).
Una vida al servicio de los más pobres y abandonados, marcada por el amor a Dios y a los hermanos, a los pequeños, a los enfermos, a los más necesitados. (Mt.25,35-SS)
Una Vida de entrega y oración, en el seguimiento amoroso a Jesucristo, donde no buscas ser servida sino servir, libre de ataduras, con una capacidad creciente de morir a ti y así darte a los demás. (Mt.20,28)
Una vida feliz, dándolo todo por amor a Jesucristo, siguiéndolo donde nadie quiere ir a evangelizar a los más pobres y abandonados. (Jn.10,10)
Una vida a ejemplo de Nuestra Señora de la Esperanza, discípula perfecta que nos enseña y nos guía para ser luz de esperanza para la humanidad. (Jn.2,5).
“Mujeres dispuestas a darlo todo por amor a Jesucristo”
La vocación es un llamado personal de Dios a tu corazón para seguir a Cristo Maestro en la vida religiosa consagrada y comunitaria.¡Anímate!!! Dios te dará la Gracia.
Puedes comunicarte con nosotras:
Hna. Diana Carolina Ramírez, M.C.M.
Acompañante vocacional
misionerascristomaestro@hotmail.com
3155107086 -3153118995
Algunos de los requisitos a tener en cuenta:
- Ser una mujer que quiera consagrar su vida a Dios.
- Un gran deseo de entrega y oración
- Que quieras vivir nuestro Carisma y Misión.
- Que seas bachiller o profesional.
- Edad promedio entre los 18 a y los 35 años.
- Que anheles la santidad.
- Que quieras ser feliz siguiendo a Jesucristo.
“La mujer soltera y la virgen se preocupan de los asuntos del Señor para estar consagradas en cuerpo y en espíritu. La casada se preocupa de los asuntos del mundo y procura agradar al marido”
1 Cor 7, 34.
“Cambiar el mundo con las pequeñas cosas de cada día, con la generosidad, con el compartir, escuchando a los demás y creando actitudes de hermandad”
“También nosotros, un día, encontramos al Señor en el camino de nuestra vida. Como los discípulos de Emaús, fuimos llamados para llevar la luz de Cristo en la noche del mundo. Ustedes, queridos jóvenes, están llamados a ser la luz en la oscuridad de la noche de tantos compañeros que aún no conocen la alegría de la vida nueva en Jesús.”
“ Dice que María se levantó sin demora y apurada fue a ver a su prima. Siempre dispuestos, siempre apurados, pero no ansiosos.”
